Vista En: TVE-1, martes 25 de diciembre de 1996.
Título Original: Alice in Wonderland.
Directores: Clyde Geronimi, Wilfred Jackson y Hamilton
Luske.
Guión: Winston Hibler, Ted Sears, Bill Peet, Erdman
Pender, Milt Banta, Bill Cottrell, Dick Kelsey, Joe Grant, Dick Huemer, Del
Connell, Tom Oreb, John Walbridge y Joe Rinaldi, con colaboración no acreditada
de Aldous Huxley, basado en la novela homónima de Lewis Carroll, publicada en
1865. Género: Animación.
Música: Oliver Wallace. Dirección Artística: [Desconocido].
Productora: Walt Disney Productions. Presupuesto: ±3.000.000 $.
País: USA. Año: 1951. Duración: 75 minutos. Color.
Voces Originales:
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Personajes:
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Kathryn Beaumont
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Alicia
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Ed Wynn
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Sombrerero Loco
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Richard Haydn
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Don Oruga
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Sterling Holloway
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Gato de Cheshire
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Jerry Colonna
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Liebre de Marzo
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Verna Felton
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Reina de Corazones
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Pat O’Malley
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Morsa/Carpintero/Tweedledee/Tweedledum
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Bill Thompson
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Conejo Blanco/Dodo
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Heather Angel
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Hermana de Alicia
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Joseph Kearns
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Pomo de la Puerta
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Larry Grey
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Bill el lagarto
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Dink Trout
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Rey de Corazones
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Alicia es una niña con una gran imaginación
que una tarde que estaba con su hermana ve corriendo a un conejo vestido,
diciendo que llega tarde. Sorprendida por ello decide seguirlo por una
madriguera, encontrando que da a un mundo mágico poblado de extrañas criaturas
con la que vive una serie de aventuras a cada cual más alocada mientras busca
al conejo.
Crítica: Fabulosa y a la vez excelsa adaptación del
clásico literario de Lewis Carroll, que recurre a todos los trucos del cine de
animación para crear una historia con un hilo narrativo mínimo pero que sirve
para hacer avanzar dicho guión, y con trazo en el dibujo tan exquisito como a
la vez esquizofrénico en el retrato de algunos personajes (Dodo, promoviendo
una danza muy especial para así secarse después de haberse mojado en el mar; el
encuentro de Alicia con la Liebre de Marzo y el Sombrerero Loco, acumulando
delirios visuales y demencias a niveles paroxísticos: una maravilla de
principio a fin; el Gato de Cheshire: alucinógeno, delirante y burlonamente
risueño, con gran diferencia el mejor de todos los personajes). Haciendo del
estilo “nonsense” británico su mejor arma para la risa y la fantasía, la
factoría de los sueños de Disney se saca de la chistera una película que si
bien se antoja demasiado corta en su duración {veinte minutos más hubieran sido
perfectos para redondear y meter lo que se dejaron fuera del libro}, el resto
es un espectáculo hecho para toda la familia con más de un mensaje y con
algunas críticas subliminales feroces en su sinsentido (el juicio al que es
sometido Alicia: una parodia de lo que es la legalidad y el poder a potencia
infinita; la variedad de animales que van y vienen a lo largo de la película,
una oda a la imaginación y que deja instantes gloriosos: el león-escoba o el
búho-acordeón son tan sensacionales como esos buitres-paraguas y los
pájaros-lápices; el ejército de la Reina de Corazones: su desfile es perfecto y
punto en boca). Un largometraje al que descontando un leve “pero” (la citada
duración), al resto solo se admite aplicarle todos los elogios para una reivindicación
a la infancia y a tener una mente imaginativa y disparatada. Entretenimiento
puro y duro, trascendente y épica a un nivel difícil de calibrar. Tan
irrepetible como jugar a croquet con flamencos.
La Puntilla: La vida sin una saludable dosis de locura es
dejar de lado todo lo que la hace tan caótica, emocionante y divertida.
Mi
Valoración
★★★★★
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