Vista En: Cines Odeón (Corvera), sábado 23 de diciembre
de 2017.
Título Original: Ferdinand.
Director: Carlos Saldanha.
Guión: Robert L. Baird, Tim Federle y Brad Copeland,
basado en una historia original de Ron Burch, David Kidd y Don Rhymer, basado a
su vez en el libro infantil La Historia de Ferdinand, de Munro Leaf y Robert
Lawson, publicado en 1936. Género: Animación.
Música: John Powell. Dirección Artística: Thomas Cardone.
Productoras: Blue Sky Studios, Davis Entertainment y
Twentieth Century Fox Animation. Presupuesto: ±111.000.000 $.
País: USA. Año: 2017. Duración: 108 minutos. Color.
Voces Originales:
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Personajes:
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John Cena
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Ferdinand
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Lily Day
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Nina
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Kate McKinnon
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Lupe
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Anthony Anderson
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Huesos
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Peyton Manning
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Guapo
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David Tennant
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Angus
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Tim Nordquist
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Máquina
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Raúl Esparza
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Moreno
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Bobby Cannavale
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Valiente
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Gina Rodriguez
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Una
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Daveed Diggs
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Dos
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Gabriel Iglesias
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Cuatro
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Ferdinand es un toro con un corazón de oro,
que se niega a ser toreado en una plaza de toros. Huyendo de su criadero recala
en una granja regentado por Nina y su padre, pero cuando crece vuelve al
criadero tras un incidente en un pueblo, buscando el modo de huir mientras un
famoso torero visita dicha ganadería para elegir un morlaco para su última
corrida.
Crítica: Recuperación del personaje que vio la luz en
un corto animado de la casa Disney en 1938, pasado por el tamiz de lo digital y
con unos secundarios de lujo que la sacan de lo convencional para meterse en lo
genial y delirante a partes iguales, si bien tiene algunos detalles de lo más
peculiares (el diseño de los humanos, más parecidos a mexicanos que a andaluces
donde se supone que se ambienta todo; Lupe, una cabra que hace honor al cliché
de locas de su raza: una perita en dulce que mete pasajes con los que es
imposible no reírse: lo de tocar la gaita es brutal; los caballos y los toros,
enfrentados en una competición de baile que empieza por poquita cosa y termina
en niveles paroxísticos: el mejor epic moment de todo su metraje). Suerte de
alegato anti-taurino con alguna que otra escena que dista y mucho de ser para
niños no por lo que se ve si no por lo que se intuye, el autor de Robots [co-dirigida con Chris Wedge, 2005] y las tres primeras parte de la franquicia de Ice Age hace con Ferdinand uno de esos filmes con más de un mensaje pero con una
envoltura de comedia familiar, amén de un sentido del ritmo ideal para que
nunca dé tiempo a aburrirse (uno de los toros, pensando que es elegido pero que
en realidad es llevado a un lugar muy distinto; Valiente, el típico cabeza dura
que se cree que puede resolverlo todo a base de fuerza bruta; la cara de
Ferdinand viendo una pared, dándose cuenta de lo que ocurre realmente con los
toros que van al ruedo). Impagable gracias a los tres erizos, que junto a Lupe
le dan el toque necesario heredero de la mejor y más clásica screwball, la hora
y tres cuartos de duración da lo que promete: un reguero de instantes
trepidantes junto a otros más emotivos (los toros, a la carrera por la ciudad),
que dan como resultado una propuesta para toda la familia donde el corazón y la
risa van de la mano hasta el final. Ciertamente, muy disfrutable.
La Puntilla: Lo mejor que puede hacerse con películas así
es no polemizarlas y disfrutarlas sin más. Y los debates, para otra ocasión.
Mi
Valoración
★★★★★
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