Vista En: Canal Hollywood, martes 8 de noviembre de
2016.
Título Original: Waterworld.
Director: Kevin Reynolds.
Guión: Peter Rader y David Twohy. Género: Ciencia Ficción.
Música: James Newton Howard. Fotografía: Dean Semler.
Decorados: Nancy Haigh. Vestuario: John Bloomfield.
Productoras: Universal Pictures, Gordon Company, Davis
Entertainment y Licht/Mueller Film Corporation. Presupuesto: ±175.000.000 $.
País: USA. Año: 1995. Duración: 135 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Kevin Costner
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Marinero
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Dennis Hopper
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Diacono
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Jeanne Tripplehorn
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Helen
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Tina Majorino
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Enola
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Michael Jeter
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Viejo Gregor
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Jack Black
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Piloto Smoker
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Kim Coates
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Vagabundo
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Robert Joy
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Joven Smoker
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Robert LaSardo
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Smitty
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Gerard Murphy
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Nord
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R. D. Call
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Protector del Atolón
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John Fleck
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Doctor de los Smokers
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: En un futuro donde los casquetes se han
fundido y el mundo ha quedado hundido bajo los océanos, un mutante sin nombre
que viaja por los océanos como simple marinero se ve atrapado en un grave
problema cuando una tribu llamada Smokers busca a Enola, una niña muy especial
ya que en su piel hay tatuado un mapa de como llegar a un sitio mítico: Tierra
Seca.
Crítica: Ambiciosa a la vez que aparatosa
superproducción que, realizada por el autor de Robin Hood, Príncipe de los
Ladrones [1991] y Rapa Nui [1994], convierte a Kevin Costner en un antihéroe de
circunstancias enfrentado a un desatado y salvaje Dennis Hopper, en otro de
esos papeles tan desmadrados como el que realizó en Terciopelo Azul [David
Lynch, 1986], cuya premisa, en principio interesante, deja algunas secuencias
lucidas pero que no acaban de tapar una historia que, precisamente, hace aguas
por todas partes debido a errores del guión no solo mal diseñados si no que ni
siquiera son explicados (Marinero, bajando al fondo del mar para dar con
material con el que hacer algo de comercio en los distintos atolones donde
habitan los supervivientes; la famosa entradilla de Universal, con el planeta
Tierra y las letras justo por delante de ella, en que éstas van desapareciendo
a medida que lentamente los continentes van cubriéndose de agua; los smokers
{fumadores}, una banda que se pasa toda la peli luciendo unos impolutos
cigarrillos: ¿de dónde narices han sacado los materiales básicos para hacer
tabaco?). Apañada en la banda sonora como en la fotografía y algunos decorados,
ni un Kevin Costner mucho menos noble que en películas como la de Robin Hood ni
bellezas como la de Jeanne Tripplehorn logran remontar lo que, sencillamente,
es una especie de remake no oficial de Mad Max II, el Guerrero de la Carretera
[George Miller, 1981], cambiando el desierto australiano de aquella por un
océano sin fin. En esencia, Waterworld no deja de ser un simple aviso sobre el
cambio climático llevado a sus últimas consecuencias, cuyas pifias son
garrafales (Tierra Seca: ¿nadie la encuentra pese a que debería verse a varios
kilómetros de distancia de aproximarse a ella?; los dos polos, norte y sur: ¿en
serio tienen agua como para sumergir el planeta?). Una enorme y terrible
oportunidad perdida.
La Puntilla: Esto es lo que pasa cuando se quiere hacer
una superproducción sin contar con un guión decente: que se hunde por si sola.
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