Publicado El: Jueves, 14-Abr-2016. Nº De Serie: C25/TCM/0000490.
Vista En: Cines Cinebox (Corvera), domingo 19 de agosto
de 2007.
Título Original: White Noise 2: The Light.
Director: Patrick Lussier.
Guión: Matt Venne. Género: Terror.
Música: Normand Corbeil. Fotografía: Brian Pearson.
Decorados: Shane Vieau. Vestuario: Maya Mani.
Productoras: Brightlight Pictures y Gold Circle Films.
Productoras: Brightlight Pictures y Gold Circle Films.
Presupuesto: ±10.000.000 $.
Países: USA y Canadá. Año: 2007. Duración: 99 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Nathan Fillion
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Abe Dale
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Katee Sackhoff
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Sherry Clarke
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Craig Fairbrass
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Henry Caine
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Adrian Holmes
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Marty Bloom
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Kendall Cross
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Rebecca Dale
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Teryl Rothery
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Julia Caine
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William MacDonald
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Dr. Karras
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Joshua J. Ballard
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Danny Dale
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Chris Shields
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Padre Nathan
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David Milchard
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Kurt
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Tegan Moss
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Liz
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Vanesa Tomasino
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Laura
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Argumento: Después de presenciar como un hombre
asesinada a su mujer y a su hijo delante de él, Abe Dale intenta suicidarse
roto por el dolor. Enviado al hospital, los médicos logran salvarle la vida, y
Dale descubre que posee la habilidad de anticipar la muerte de una persona,
pero al intentar evitar esas muertes los supervivientes acaban cometiendo
terribles crímenes.
Crítica: Lussier, creador de la trilogía de Drácula
2001, realiza la secuela de la cinta que dirigió Geoffrey Sax dos años atrás,
pero con una historia y unos personajes totalmente ajenos a la misma, cambiando
lo que es las psicofonías por las ECMs (Experiencias Cercanas a la Muerte), y
con el protagonista de la serie Firefly [2002], que efectúa un cambio de
registro para mostrar su lado más dramático, al lado de otra habitual de la
ciencia ficción, la Starbuck de la serie Galáctica, Estrella de Combate [2004].
La unión de ambos es lo que va llevando el peso de la cinta que empieza potente
pero luego se deshincha poco a poco, desluciéndose un poco en sus efectos especiales
(el inicio en el restaurante, despiadado y desgarrador como él solo; las
distintas visiones de Abe, en principio geniales pero luego algo menos
logradas; Abe, en un túnel muy peculiar: sin duda alguna los minutos más
evocadores del metraje). Del mismo modo, el guión se balancea entre el puro
terror y un relato de intriga, algo que intenta equilibrar tirando de clichés y
topicazos, pero también de un cierto tono macabro que le da algo de emoción al
film, jugando con un par de ideas interesantes (Abe, en la obligada visita a un
hospital para charlar con alguien que sabe más que él de lo que pasa; la
investigación de Henry Caine, curiosa cuando menos; uno de los salvados por
Abe, víctima de otra cosa más siniestra mientras toca el piano: ¿qué motivó lo
ocurrido?). Acentuadamente trágica y de escena final algo ortopédica, la
película se deja ver como lo que es: un relato de terror correcto, a veces muy
sólido, a veces no tanto, que sirve para juntar a dos intérpretes del panteón
de la ciencia ficción televisiva metidos no en asuntos espaciales, si no
paranormales. Un producto solvente y entretenido pese a sus defectos, cuya
mezcla ofrece resultados variados pero no por ello desastrosos. Terror de serie
B con cierto toque de ingenio.
La Puntilla: “¿Te intentas suicidar y vuelves con el poder
de saber quien va a morir?. ¡Pues a mí no me mires!. ¡Lárgate!. ¡FUERA DE
AQUÍ!”.
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