Publicado El: Miércoles, 20-Jul-2016. Nº De Serie: C25/TCM/0000675.
Vista En: Paramount Channel, viernes 1 julio de 2016.
Título Original: Tang Shan Da Xiong [N. del T.: The Big Boss].
Director: Lo Wei.
Guión: Lo Wei. Género: Artes Marciales.
Música: Fu-Ling Wang. Fotografía: Ching-Chu Chen.
Decorados: [Desconocido]. Vestuario: Chu Liu.
Productora: Golden Harvest Company. Presupuesto: ±100.000 $.
País: Hong Kong. Año: 1971. Duración: 100 minutos. Color.
Reparto:
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Personajes:
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Bruce Lee
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Cheng Chao-an
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Maria Yi
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Mei Chow
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James Tien
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Chien Hsiu
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Marilyn Bautista
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Srta. Wuman
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Ying-Chieh Han
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Mi Hsiao
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Tony Liu
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Chiun Hsiao
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Quin Lee
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Kun Ah
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Ching-Ying Lam
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Yen Ah
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Nora Miao
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Dueña de licorería
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Shan Chin
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Sze Hua
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Chia-Cheng Tu
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Tío
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Chih Chen
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Dueño de la Factoría
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(Para ver su ficha completa en IMDb, pinchar aquí)
Argumento: Cheng Chao-an es un joven que viaja a Bangkok
para ganarse la vida trabajando en una fábrica de hielo. Aunque le ha prometido
a su madre volver a pelear, se ve forzado a romper su juramento cuando algunos
de los compañeros de trabajo de la fábrica desaparecen al descubrir que la
fábrica es en verdad una tapadera para el tráfico de drogas y la prostitución.
Crítica: Bruce Lee, actor de amplísima carrera en Hong
Kong desde que era un niño, y secundario en las series de TV El Avispón Verde
[1966] y Longstreet [1971], abandona los dramas y las comedias que hizo en los
años 50 para dar un recetario de artes marciales en formato largo, en una
película lastrada por la simpleza de un guión que discurre muy lentamente, y
cuya banda sonora y vestuario calcan la época de su estreno de una forma tan
drástica que es tan fashion como a la vez desfasado (las tretas del jefe para
mantener engañado a Chen, de una inocencia abrumadora; éste y sus amigos,
insistiendo en avisar a la policía pero nunca llegando a hacerlo; el momento en
que Chen rompe su promesa: se hace mucho de rogar, pero se agradece enormemente
cuando al fin esto sucede). Su guión, repleto de clichés usados con bastante
habilidad, transitan sin prisa por su metraje ajustado que posee una bonita
fotografía de la capital de Tailandia, como también la exótica y angelical
belleza de Maria Yi, haciendo de su personaje uno de los pilares básicos de la
película (Mei, la única que parece pensar de verdad: su regañina a Cheng y los
demás tras una inconsciente celebración es de nota; la reunión entre el capataz
y dos de sus empleados, que han descubierto lo que había dentro de un bloque de
hielo: se le ve venir de lejos la intención; el hijo del dueño y sus colegas,
la clásica panda de gamberros que se creen con derecho a todo). Aunque hay uno
o dos detalles que acaban por rechinar de forma involuntaria (Cheng y sus
amigos, capaces de dar unos saltos que ni un canguro; la coreografía en sus
peleas, a las que les falta dinamismo y les sobra pose), Karate a Muerte en
Bangkok, traducción muy alejada aunque no desacertada del original “El Gran
Jefe”, es una película pequeña y sencilla que convierte a Bruce Lee en un
maestro de la lucha oriental y en un icono por derecho propio. Ha nacido una
estrella.
La Puntilla: ¿Y tanto les costaba avisar a la maldita poli
para que empezasen a buscar a los desaparecidos de una puñetera vez?. Anda
queeee...
Mi
Valoración
★★★★★
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